“Ilusión”, “traspasar barreras”, “romper el hielo”, “sentirme capaz”, “volar hacia mis sueños”, “encontrar soluciones”, “descubrir el territorio”… son algunas de las devoluciones que han hecho las alumnas y alumnos del taller Transforma tu idea en un proyecto real durante el ejercicio de evaluación con el que hemos puesto fin a la fase presencial.
Después de varias semanas trabajando con un grupo cada vez más enraizado y completamente implicado en dar forma sus proyectos, el pasado viernes dijimos adiós al espacio que ha albergado esta experiencia: un aula cuyas paredes, al inicio vacías, han ido cubriéndose de las ideas y materiales generados por cada uno de los alumnos en su propósito de perfilar sus sueños y aterrizarlos en la comarca. Mapas con empresas del territorio, murales que ilustran el fondo y la forma de cada proyecto, diagramas de objetivos y tareas, frases que definen nuestras metas… son algunos de los ejemplos que componen este mosaico.
Así, tomando conciencia del trabajo avanzado, identificando nuestro aprendizaje y haciendo un recorrido por los momentos clave del taller, celebramos el cierre de esta etapa y el paso a la siguiente: el módulo no presencial en el que los alumnos y alumnas, contando con apoyo y seguimiento personalizado, llevarán a la práctica las primeras tareas para que sus empresas empiecen a caminar.
Llegado este punto, podemos decir en reconocimiento a estos alumnos, que la Sierra de Segura cuenta con un mayor patrimonio de personas motivadas y convencidas de emprender aquí y con un interesante abanico de ideas que están muy cerca de transformarse en proyectos reales.